El día que mi vida cambió…

Hay momentos, situaciones, experiencias que te marcan la vida. Algunas te la cambian para siempre y marcan un antes y un después. En 2009 comenzó para mi una vivencia de no retorno. En aquel momento me preparaba para conocer a la persona que daría el mayor giro a mi vida, un giro que ni siquiera podía entonces imaginar o intuir… Hoy hace cuatro años viví una de esas experiencias transcendentales, únicas, sin regreso al punto de partida. Toda mi vida se puso patas arriba, fue un tsunami que me sacudió desde los cimientos!! Hoy hace cuatro años (y nueve meses) llegaste a nuestras vidas para darnos el mayor aprendizaje de todos, para mostrarnos lo más valioso, lo importante, lo que de verdad vale la pena. Hoy hace cuatro años llegaste a este mundo para enseñarnos que aún es posible y necesario creer en el ser humano, para despojarnos de lo superfluo, de lo innecesario,… Hace cuatro años me hiciste nacer como madre, un camino de aprendizaje, de introspección, de análisis, de superación personal. No soy madre perfecta, ninguna lo somos. Ni siquiera tengo interés o aspiración por serlo. Sólo soy una madre humana de una hija humana que trata de aprender día a día.

Gracias hija mía por todo lo que me muestras cada día, por las enseñanzas, por indicarme el camino y por quererme en mi imperfección, tal cual soy. Gracias por estos cuatro años intensos, de vivencias y experiencias. Gracias por cuatro años de cansancio también, de horas de sueño, de miedos, de lágrimas e inseguridad compartidas que hemos superado juntas. Gracias por cuatro años de crianza cercana, mamífera. Cuatro años a tu lado, de lactancia ininterrumpida, de brazos, de abrazos, de besos y caricias. Gracias por cuatro años de calor, de afectos, de sueños, de búsqueda, y crecimiento.  Gracias por este amor incondicional que nos tenemos, por elegirme como madre para acompañarte en esta vida. Gracias por tanto hija mia…

Feliz Cumpleaños Carmen!!!